El pasado 16 de septiembre se publicada la modificación de la Ley de tránsito, en lo que se refiere al delito de manejo en estado de ebriedad, causando lesiones graves, graví­simas o con resultado de muerte.

Emilia Silva Figueroa era una niña de nueve meses que murió cuando el vehí­culo en el que viajaba con sus padres recibió un golpe de otro vehí­culo conducido por Nelson Fariña, que tení­a 2.05g/l de alcohol en sangre. El Tribunal Penal condenó a este conductor a dos años de prisión por manejar en estado de ebriedad, por causar la muerte de la niña y por generar lesiones a la madre de la menor. El fallo le concedí­a, además, el beneficio de la remisión condicional de la pena privativa de libertad.

Los Padres de Emilia hicieron un llamamiento a la sociedad y al gobierno, alertando de la necesidad de endurecer las penas a los conductores ebrios que provoquen accidentes con ví­ctimas mortales.

La nueva ley introduce medidas más duras para las personas que den positivo en el examen de ebriedad. Además, aquellos que se nieguen de forma injustificada a someterse a estas pruebas respiratorios u a otros exámenes cientí­ficos para valorar la presencia de alcohol o sustancias estupefacientes, serás sancionados con una multa de tres a diez unidades tributarias mensuales y la suspensión de su licencia hasta un mes.

 Ver texto completo de la LEY EMILIA.